EN LA PRIMERA NOCHE LUNÁTICA NOS ADENTRAMOS EN EL MUNDO APASIONANTE DE LAS PINTORAS SURREALISTAS A TRAVÉS DE UNA EXPERIENCIA ARTÍSTICA QUE NO DEJÓ A NADIE INDIFERENTE.
Por fín llegó el primer evento artístico que realizamos en el taller como Tintoreras.
Las noches de luna llena, además de luz, se llenan de arte y creatividad en nuestro espacio.
Decidimos poner en marcha distintas propuestas en las que el hilo conductor es conocer a una artista del mundo de las artes visuales a través de una proyección y la posterior realización de un debate y una actividad creativa relacionada con lo que se ha visualizado.
En las noches lunáticas la protagonista es la Luna, ¿por qué las mujeres surrealistas para esta primera noche? Porque al igual que la Luna tiene su parte oculta, el Surrealismo también lo tuvo.
La parte oculta de la Luna es como estas pintoras, ocultas e invisibles en un contexto que no acompañaba a la mujer artista, pero tan reales e inconformistas como sus visibles compañeros de movimiento de vanguardia. Además, la temática de la obra de muchas mujeres surrealistas, presenta un nexo con lo telúrico, en el amplio sentido de cómo afecta la Luna al planeta Tierra y a los que habitan en él, sobre todo a las mujeres, por los ciclos menstruales, tema ampliamente debatido en los círculos feministas.
De todas las mujeres artistas surrealistas nos centramos en Leonora Carrington y Remedios Varo ya que en la obra de ambas los escenarios mágicos iluminados por la Luna forman parte de su imaginario común. Tras la visualización del documental “Leonora Carrington. Imaginación a galope fino” y la lectura de uno de sus relatos “La debutante”, establecimos un debate antes de pasar a la dinámica plástica preparada para esta ocasión.
La dinámica propuesta se basó en un juego a través del collage denominado “el encuentro fortuito de un paraguas y una máquina de coser en una mesa de disección” que utilizaban los surrealistas para inspirarse. En el collage, la aproximación de dos o más elementos aparentemente extraños entre sí y descontextualizados de su plano habitual generan una poesía o narrativa visual. La idea es crear sin prejuicios, y despojarse de la rigidez de las normas y patrones adquiridos a lo largo de nuestra vida, creando desde lo más profundo del ser y de la manera más sincera e intuitiva. Los participantes eligieron un fondo o escenario, que previamente habíamos transferido a una cartulina, y dos objetos “aparentemente extraños” y a partir de ahí crearon su collage narrando historias en unos casos mágicas, en otros divertidas y sorprendentes, algunas un poco bizarras… pero con un nexo común que fue el carácter personal y sumamente imaginativo de las narraciones.
Muchos de los participantes no estaban habituados al lenguaje artístico y se sorprendieron de cómo habían accedido a su parte más creativa. También se dieron cuenta de que eran capaces de crear collages con los que podían contar historias y utilizarlo como herramienta para el autoconocimiento, más allá de la mera satisfacción por el resultado estético del mismo.
Como una imagen vale más que mil palabras, podéis ver en la galería de imágenes lo bien que lo pasamos y las obras tan potentes que surgieron.
Muy buena página la que habéis montado.
Y grandes iniciativas las que organizáis.
Sólo desearos que se cumplan vuestros sueños.
Un abrazo
Manolo